Aparición Divina


A veces resulta curioso que aquello que haces durante más tiempo no es lo que marca el recuerdo de una tarde, sino un instante, una acción breve, una palabra o una mirada.
Como la última visita a Nova Bruc, después de casi dos meses de no ir.
Lo decidí, como casi siempre, en el último instante.
Fue llegar al centro y cambiar la dirección de mis pasos, del metro a la sauna.

Y no caí que ese día era el que también lo frecuentaba el zalamero que en varias ocasiones había intentado llevarme al huerto.
Me echo el ojo nada más cruzar la puerta que va del bar al espacio común de las duchas, piscina y jacuzzi, y comenzó a seguirme discretamente hasta que entre en la zona del cuarto oscuro.
Allí se me acercó y empezó a regalarme el oído y engatusarme con su palabrería.

No me suele gustar demasiado que me adulen, como mucho, lo justo como para mantener el ego  y sin más intencionalidad que esa, pero que nazca de la sinceridad, del merecimiento, del aprecio, pero sobre todo, sobre todo, me tiene que resultar creíble .

Su piropeo, evidentemente, tenía toda la intencionalidad de echar un polvo conmigo. Aprecio no me podía sentir, pues no nos conocíamos más de cuatro palabras y dos sobadas en encuentros anteriores. Merecimiento tampoco, pues nada había hecho yo que me los mereciera. Tal vez fuera sincero, pero no me resultaba, en ningún caso, creible.
Cuando la estrategia del que bueno estás, que guapo eres, te dejo hacerme lo que quieras, ya verás lo bien que lo pasamos y vamos a una cabina no le funcionó, pasó a lo mismo, pero cambiando a un te hago lo que quieras, te mamo, te lamo el culo y luego te folló.
Bien, eso me sonó mejor... no tanto en cuanto él fuera a hacerme a mí lo que yo quisiera, ya que casi siempre prefiero ser un 'mandao' y hacer lo que me piden, si no en lo que se ofrecía a hacerme, yo no tendría que implicarme mucho, sólo dejarme hacer, y eso era así, porque el tío no me motivaba.
Y no porque no me resultara atractivo fisicamente, tiene su punto, sino por su manera de abordarme.
Eso es una constante en mí, desde hace tiempo. Si me falla la actitud... por mi bueno que esté el mozo, no hay tu tía que valga.

Así que me dejé 'seducir', convencido que no me implicaría más de lo necesario para hacerme lo que quería.
Me mamó bien, me lamió el ojete mejor y la follada simplemente fue discreta.
Yo no hice nada, por raro que parezca, excepto ir pajeándolo.
Para finalizar me pidió que me corriera en su boca, cosa que hice.
Salimos, y me lo agradeció mucho. Con todo, estuvimos al menos tres cuartos de hora y si he de ser sincero, no lo pasé mal.
Pero no acabé de estar a gusto del todo.
En una situación normal, me hubiera duchado, vestido e ido.
Pero como todo ocurrió seguido y nada más llegar a la sauna, quise disfrutar un rato, por lo menos de la piscina y sus benditos chorros, y luego ya se vería.

Así me relajé un buen rato y luego me fui a dar un paseíllo por la sauna seca, la de vapor y de nuevo al cuarto oscuro.
Fue cuando aprecié también que en ambas saunas había más luz que otros días, y eso no me gustó.
Y digo también porque en la sala principal también noté más luminosidad nada más entrar.
El cuarto oscuro seguía igual, salvo que habían instalado unos pequeños y bajos sofás, a buena altura por si a alguno le apeteciera sentarse cómodamente a mamar pollas, en vez de estar en cuclillas o arrodillado.

Hubieron varios momentos de roces con el personal allí presente, y fué en uno de ellos cuando de repente como salido de la nada apareció Dios convertido en carne de Macho.
Apuesto, alto, viril, con su pelo en pecho, cuerpo perfertamente moldeado, torso perfecto, pero sin durezas.
Mi boca fue directa a sus pezones y mi mano a su prominente rabo.
Se dejó hacer un poco, hasta que me dió la vuelta y me hizo inclinar hacia delante con toda la intencionalidad que os podéis pensar.
Vamos que me colocó mirando a Cuenca, en un plis plas.
Pero no todo iba a ser perfecto. Estas intenciones parecían estar reñidas con el látex, y mucho me temía que mi dilatado ojete de aquella tarde, después del trabajito que le habían dedicado, se mostrara demasiado ansioso y complacido ante tal derroche de dominación y hombría.
Pero no. Se supo comportar, y se cerró en banda.
No pudo hacer nada más que desistir de su empeño, y volviendo yo a una digna posición, seguí con mi trabajito de lengua y mano hasta que se corrió.
La verdad es que se lo hizo enseguida, fue breve y se marchó deprisa, dejándome la miel en los labios, pues ni siquiera llegué a probar su portentosa vara.
Todo en apenas cinco divinos minutos en que acaricie el cielo, pero no entró en mí...

Así que, más caliente que una perra, hice uso de los sofacitos.
Y acabó bien la tarde.

Comentarios

  1. Cómo puede ser que el primer chaval te pudo follar y el segundo no?

    Aunque el primero no haya sido la "panacea", tampoco fue mal, no? Has hecho feliz a un tío....

    Yo, las pocas veces q voy a saunas, sí que aprovecho bien las instalaciones, a parte de sexo, también quiero pasarme horas alternando jacuzzis, sauna húmeda y seca y duchas....suelo salir más arrugao que " El abuelo de los Simpsons" 🤣. (Bcn1972).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El tío quería follarme sin condón "Estas intenciones parecían estar reñidas con el látex", y mi ojete, a veces más listo que yo, se negó a abrirse. "Pero no. Se supo comportar, y se cerró en banda" ;-)

      Eliminar
    2. Coñoooo: SIN???
      Tu ojete es cómo el del "Recio": Tiene un mecanismo ancestral de defensa 🤣🤣🤣. (Bcn1972).

      Eliminar
    3. Jajaja... alguna vez, no obstante, el mecanismo ancestral ha fallado.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares