Momentos robados IV ( En la sauna Nova Bruc )



Sauna Nova Bruc (primer dia)

Sábado por la mañana, entre las 11.30 h. y las 12.30 h.
Día y hora absolutamente inaudito en mis momentos de escarceos perrunos.
Casi se podria decir que visita express, en menos de una hora, fue casi entrar y salir.
Había muy poca gente, aunque no sé si eso era lo normal.
En la sauna seca habían dos tíos tumbados, uno al fondo de la misma, y otro en la parte del asiento más cercano a la puerta.
Es este último quien al entrar, me mira de reojo, y se incorporó quedándose sentado, y comenzando descaradamente a tocarse el pecho peludo, en un gesto como invitándome a participar en el magreo.

Le metí mano, pues era evidente que eso queria. Un tío maduro, tal vez sobre los cincuenta y pocos años, de carnes prietas y en buena forma.
Insinuó con la mano salir y se incorporó, saliendo de la sauna finlandesa.
Le seguí, pues que otra cosa podía hacer?, y se dirigió a la zona de cruising, metiéndose en el segundo cuarto, el que está junto al bar.
No me hizo gracia que para la poca gente que había, tuvieramos que tener tanta intimidad.
Pero le seguí.

Comencé a mamarle, pezones y polla, y en un momento que estaba de pie, comenzó a juguetear con mi trasero y a meterme un dedo por mi recatado y tímido ojete.
Y de juguetear pasó directamente a follármelo entusiasmadamente.
Me dió la vuelta y me hizo poner a cuatro patas sobre la colchoneta, sobre la cual, acto seguido, comenzó a follarme a lo perro, nunca mejor dicho.

Su cipote, para mi sorpresa, entró de maravilla, pero el vaivén del metesaca no acababa de rular como debiera, así que me dió la vuelta, y patiabierto boca arriba continuó con la faena, esta vez, sí, sin ningún tipo de molestia.

Realmente fue un polvazo inesperado, tanto por el día, hora, ambiente y lugar.

Y esta vez, junto con él, también me corrí yo sobre mi pecho.


Sauna Nova Bruc (segundo dia)


Días después, en mi segunda visita al local, ya en horario habitual, pero otra vez controlando los tiempos ví que habían comenzado las obras de ampliación de la sauna.
No sabia en que iban a consistir, si habrían nuevas instalaciones, sólo que la hacían más grande.

En la sauna de vapor, un tío de mediana edad superpeludo me cogió por banda y me dió una buena mamada.
No estoy muy acostumbrado a ello, así que lo agradecí, y de hecho, fue lo que más disfruté en aquella tarde.

De hecho, nada más cuajó, ni en la sauna de vapor, ni en la finlandesa, ni en el minicine.
Y de últimas, ya en el pequeño cuarto oscuro del fondo de la zona de cruising, había un tío mayor sentado en la grada, que se dejaba mamar gustosamente por uno mucho más joven.
Este al verme que me los quedaba mirando, me hizo una señal para que me acercara.
Mientras el joven mamaba, el mayor comenzó a tocarme las tetillas y al ver que me dejaba, se apartó del chaval, dejándole sin polla y ofreciéndomela a mí.
Me amorré, un poco con sentimiento de culpa, pues para nada era mi intencíón de quitarle el rabo, ni siquiera de compartirlo, como hubiera sido lo normal en mí.
Y en apenas diez segundos, siendo generoso, se corrió.
Uf,-, exclamó.
Es que me había dejado a punto,- continuó para excusarse de su pronta corrida.
Me sentí peor.

Me fuí al minicine, me dejé tocar y pajear sin muchas ganas por alguien que ni recuerdo, y me corrí a los pocos minutos.

Una tarde extraña.

Comentarios

  1. Yo patiabierto boca arriba (gracias por la expresión, me la copio), me corro en medio minuto.

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  2. "Perro" siendo follao a lo "perro".......mmmmmmmmm.
    BCN1972

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