¿Quieres que te coma el culo? - (1ª parte)




Había llegado, por fin, a la puerta del New Copper.
Empujé la puerta y ascendí los cuatro o cinco escalones.

Justo entró detrás mío un señor alto, bastante mayor, andar renqueante, y cuerpo decrépito.
Se trataba de un inglés, como me enteré nada más quedarse en bolas, saludar y presentarse como un auténtico gentleman con apretón de manos incluido, al barman, a mí y a otro cliente que alli habia en la barra, un tio guapetón y buenorro.
Estaba junto a ambos, mirando embobado la escena, cuando el tio buenorro me despertó de mi atontamiento con una bateria de preguntas.

- Bueno, y tu eres inglés, alemán, holandés, francés, italiano, ...?- inquirió en correcto castellano, con un ademán y tono un tanto sobrado, con un punto de cierta estupidez, que no parecía lógica a esa situación.
- Soy de aquí,- le dije con toda la ambigüedad e intencionalidad posible, no sin sorprenderme de su extraña actitud.
- Ah, bona nit, pues,- me contestó, de una manera un poco más natural y relajada.

Me dijo su nombre. Mentí sobre el mío.

Comenzó a partir de ahí toda una serie de estiramientos, no sé si con el fin de pavonear o simplemente calentar músculo, que si tensaba brazos a la espalda marcanco pectorales, que si ahora biceps, que si ahora triceps.
Aunque no se decidia a nada, pues de hecho ni me miraba, sólo al video, todo eran señales.
Se si estiro esto, que lo otro, que me toco el paquete como quien no quiere, que me voy un momento tras la cortinilla.

En un momento, le oí preguntar por lo bajín al camarero por los allí presentes.
Mientras, apareció por ahí otro tipo, supongo que debía estar en el baño, en la cincuentena, buen aspecto y creo que se conocían entre ellos, que se sitio en el extremo de la barra.

En nada también llegaron al local dos tíos juntos, y un tercero detrás.

Comencé a ponerme muy nervioso, porque aquello realmente se estaba llegando de gente, cosa que para mi, como decía, me resultaba inaudita, e intui que por fín podría llegar a pasar algo, pues que recuerde, lo más atrevido que llegué a ver en el local fue lo que yo, mismamente, hice el año anterior. (Post: Del New Copper).

Tal vez quien estuviera nervioso fuera él, así que para comprobar sus intenciones y facilitarle el camino, obviamente también a mí, me fuí para el sofá.
Inmediatamente me siguió, sentándose en el taburete, quedando claro que quería rollo, pero seguía sin saber como dar el primer paso.
Me levanté, le metí mano sin mucho pudor y comencé a lamerle y mordisquear sus pezones.

Y ya fue cuando comenzó los sobamientos y toqueteos, pezoneo suave, y comida de polla, esto por mi parte ya que seguía sentado en el taburete.
El tio era muy inquieto y no se paraba mucho en una acción concreta.
Su estilo, lejos de lo que me pareció en un principio un poco estúpido, era en realidad, simplemente directo, al menos una vez puesto en acción.

Fue cuando comencé a sospechar una cosa.
Aquel tipo lo conocía. La impresión y su actitud era muy similar a aquella primera vez, salvando las diferencias entre las que uno pueda tener en un pub como el Lovers a un sex bar como el Copper.
Solo no coincidia la consistencia del asunto, oséase, el pollamen.
De entonces lo recordaba siempre duro y erecto, y esta vez, por mucho que se lo trabajara, no pasaba de notable morcillón, pero morcillón al fin y al cabo.

Era el mismo tipo que me encontré dos años atrás, en el Lovers, que posteriormente me llevó al Bears Bar, y al que estuve comiéndole la polla por todos lo rincones. (Posts: La primera noche, último párrafo de la parte 1, y la totalidad de las partes 2,3 y 4)

"Nada más salir, casi choqué de morros con un tipo calvo, con barbita bien recortada, macho y varonil, más alto que yo, que con sus ojos curiosos, chisposos y morbosa mirada, me dió un repaso de arriba a abajo que me fulminó y me dejó con las piernecillas temblando."
"Guapo, buen cuerpo y con muchísimo morbo, parecía sacado de una revista.
Un tío imposible, de estos que ya sabes de entrada que no son para uno. Demasiado de todo para que se fije en mí, y menos que quiera hacer algo conmigo, pensé."
 "Sin embargo, aquella mirada... puffff..."

- Quieres que te coma el culo?, preguntó ...

(Continuará)



Comentarios

  1. Justo el día que más interesante se te pone la cosa, es justo el día que se llena de gente... y encima con este tío con el que ya parecías tener alguna experiencia. Deseando leer la siguiente parte con tu respuesta a tal sugerente petición ;)

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