Por fin, se acabó !

 

Por fin  acabé de escribir y publicar dos bloques de historias, el de la última putisemana  en Benidorm en junio pasado y,  justo con último post, el de la última putisemana en Torremolinos.

Ambas compartían el hecho que me daba bastante pereza retomar los borradores de las historias a medio escribir que, en ambas y en general salvando puntualmente algun caso, me parecieron ya en su momento y confirmado al perfilarlas como poco "golosas", con poco morbo o poco excitantes. 

Excitar tampoco es lo que pretendo en mi blog, sino contaros lo bueno o malo, excitante o no, que me va pasando en mis salidas. Y, a veces, reflexiones sobre ellas. A veces con cierto humor y otras más mecánica y fríamente.

A ver, siempre ocurre de tanto en tanto hay experiencias poco sustanciosas o peculiares, varios salidas consecutivas de historias flojas o de no ocurrir nada destacable. Pero en el blog quedan un tanto disimuladas porque siempre las puedo contar no necesariamente de manera cronológica.

Pero las putisemanas las tengo que contar en bloque, y son y salen como son.

La última de Benidorm resultó bastante floja pues coincidió exclusivamente en días laborales y totalmente fuera de temporada de verano. Poca gente y mal tiempo.

Y la última de Torremolinos resultó floja por mis paranoias con el covid y mpox. Al menos, y fuera de horas de perreo, el tiempo acompañó y disfrute de paseos, playa, lectura y relax. 

Ya solo quedan por contar, para ponerme al día las últimas historias del 2019, las escasísimas del 2020 al 2022. Y casi todas, excepto una, en el entorno de la sauna Bruc d Barcelona.

Ha coincidido que justo el día que acababa el borrador del último post "Gutiérrez. Diamente en bruto", se me confirmó tanto la posibilidad de disfrutar de una nueva putisalida, como la reserva de hotel que me dará cobijo para esos días.

Curiosamente faltaban justo 100 días para su inicio. Ahora menos, claro :-)