Una visita a la Sauna Bruc ( Experiencia de un lector ) - 3ª y última parte

 


(Continuación)

Ya siendo las 19 h  (llevaba unas 4 horas, que me habían pasado  rápidas), me dirigí a explorar a fondo el cuarto oscuro del final.

Ví que me iba siguiendo un maduro que estaba muy bien y que toda la tarde se había fijado mucho en mí. 

Entré en el cuarto y estaba oscuro total. Había de hacerme a la oscuridad y me puse en un rincón de la izquierda. Vi que también entró ese maduro. 

Me fui poniendo a tono ya viendo las sombras. Dos corrillos y uno de ellos a mi lado, cosa que agradecí como agradecí que mi vista viera cómo disfrutaban, aunque no paso mucho tiempo que varias personas se me abalanzaran. Noté varias manos acariciando partes de mi cuerpo desnudo y no supe que carajo me pasó que empecé a agobiarme y a quitarme de encima esas manos, cosa que era imposible ya que volvían a mi.
Quería salir de ahí pero no pude, así que decidí rendirme. Levanté las manos y me dejé llevar para que me usarán a su antojo, y a todo eso, poco a poco empecé a calentarme y a tener una erección a causa del morbo que da que varias personas estuvieran acariciándome. 

No tardó nada en unirse ese maduro, que aprovechó también en tocarme, aunque incidiendo más en mis glúteos (o mejor llamado culo). Me dijo al oído que si quería ir a una cabina, pero le dije que no (hubiera perdido el morbo de estar con gente ahí). 

A los pocos minutos la gente empezó a retirar de mí y me quedé con el maduro, acariciándonos.
Se me puso atrás, nos acercamos a la cama, me incliné un poco hacia delante y en ese momento me cogió para follarme
Al ir a empezar quise girarme y decirle que "sin condón" no, pero acto seguido empezó y resultó ser una simulación, así que me relajé y disfruté de las embestidas simuladas que me puso más caliente que una perra. ¡Joder... Que ganas de volver a sentirlo!.

Me preguntó al oído que si me gustaba que me comieran el culo. No mucho, le dije, pero que si a él le gusta comerlo pues adelante. A ver, nunca se sabe si me fuera a gustar o no. 

Para ello me puse encima de la cama, me puse a cuatro patas y el culo a la orilla de la cama, quedando  el culo mirando hacia la puerta de entrada al cuarto. La parte delantera del cuerpo apoyada en la cama, es decir, la cabeza descansando en ella y el culo bien en pompa. 

Ya empecé a notar su lengua y boca húmedas y calientes
¡Joder!. No me había acabado de ponerme cómodo que ya empezó, y no aparentaba mal. 

Mientras empezaba a jugar con su lengua la entrada de mi orificio, arqueé mucho la espalda para que mi agujero subiera un poco más y al tío no le fuese incómodo jugar. 
Iba notando sus lengüetazos. Iba recorriendo ese agujero que me estaba empezando a dar placer, en contra de todo pronóstico. No parecía cansarse y, aunque yo no estaba muy cómodo, el placer me vencía y seguí aguantando y cerrando los ojos para abandonarme al placer. A ese placer del que muchas veces huimos por los motivos que sea, y hay que saber disfrutar, no?. 

Desde esa posición, decidí poco a poco ir abriéndome de piernas mientras él seguía haciéndome disfrutar. Al ir abriéndome de piernas, noté como mi polla quedaba colgando al estar a la orilla de esa cama. Pensé que me gustaría que mientras me comen el culo con esa ímpetu, me ordeñaran. Me ordeñaran cómo a una vaca para sacarle la leche. Una buena paja en esa posición es mi debilidad y si me comen el culo a la vez...... ¡Uf, no veas!. 

Iba mirando la gente del cuarto. No me quería cortar y quería gemir. Necesiba gemir. ¿Que comida de culo más buena!, así que gemí sin importar nada.

El tío utilizaba lengua y boca. Notaba su saliva caliente por toda mi raja. Se desvivía en trabajar me bien. Me sorprendió cuando me cogió la polla y me empezó a ordeñarla al mismo tiempo que no dejaba mi culo para nada.

No paraba de pajearme a cuatro patas, a comer mi culo sediento de pollas... 

Me hubiera corrido, pero hacia todo lo posible para no hacerlo. Quería que ese placer no acabara.

¡Que gusto!. Y como tal gusto llegó un momento en que no pude más. Le grité que parara, que me iba a correr y él siguió, así que yo me abandoné al placer prohibido, y empecé a correrme de tal manera que gemí fuerte, notaba cómo me iba saliendo los chorros de lefa mientras su lengua seguía sin descanso explorando mi culo que después de esa corrida quedó tan satisfecho cómo si me hubieran follado 5 tíos uno detrás de otro. 

¡Jodeeeeeeer!.¡ Creo que nunca tuve tanto placer!.
Tanto placer que el maduro tuvo que ayudarme a levantarme debido a que me había quedado clavado en esa posición y no me podía mover. Si se hubiera ido, me hubiera quedado así, con el culo pidiendo más guerra. 

Casi ni podía andar y me ayudó a salir del cuarto. Ya iba recuperando la movilidad. Creo que estuve más de 20 minutos así. 

Estuvimos hablando y me dijo que le había atraído de mí que tengo un culo muy bonito (¡Joder, que halago!) y que él era muy exigente a la hora de comerse uno y toda la tarde estuvo detrás mío, ya que al ir desnudo vió mi culo. 

La pena es que él suele ir los sábados y ese miércoles fue una excepción, suele ir los sábados y yo los sábados lo tengo algo mal, aunque alguno podría. 

Que pena.Me gustaría volver a coincidir con él. 

( 5 Abril 2023 )

Fin



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